El profesorado está asistiendo en estos últimos años a unos cambios ante los que puede mostrarse totalmente activo y motivado por las nuevas “formas de enseñar”, o por el contrario puede hacerse el distraido e ignorar estos cambios perdiendo el gran potencial que ofrecen.
Aspectos que los formadores han buscado desde siempre, como la motivación o la implicación, con las TIC se potencian de tal modo que sería ridículo ignorarlas. Pero una gran parte del profesorado se ve desbordado por la tecnología e incluso advierten que sus alumnos manejan dichas herramientas con mayor soltura que ellos, y ante este panorama deben sacar lo mejor de si mismos para explotar este potencial en aras de una mejor formación.
El elemento clave en la formación, a pesar de la tecnología, siguen siendo los profesores y por eso es necesario contar con ellos, contar con su implicación, contar con su potencial, y con su interés. Las Tecnologías de la Información y de la Comunicación han llegado para quedarse y por tanto los profesores deben aprender a trabajar con ellas y exprimir todo el potencial que presentan.
La entrada de la tecnología en las aulas es sumamente positiva por todo lo que ofrece. Los alumnos pueden avanzar a un ritmo diferente cada uno, pueden todos ellos practicar al mismo tiempo, además se van a sentir más motivados al advertir sus progresos, pero todo ello no vale si detrás de ello no existe un docente que haya establecido unos objetivos y un modo de alcanzarlos.
La tecnología también permite que las familias estén totalmente integradas en el proceso educativo de sus hijos o hijas. Esta implicación es otro de los aspectos que siempre se ha buscado porque se ha demostrado que los alumnos cuyas familias están comprometidas suelen tener mejores resultados académicos que los que no lo están. Y en muchas casos esta implicación no se ha comseguido por problemas de tiempo por lo que ahora, a través de aplicaciones informáticas, los padres pueden estar informados en todo momento de la actividad de sus hijos en las escuelas.
Los profesores deben asistir a esta irrupción tecnológica en las aulas con la mejor predisposición, ilución y compromiso, y así aprovechar todos los beneficios que va a aportar. Si hasta la fecha el reciclaje de los profesores era vital hoy en día lo es más aún y desde IesFácil sabemos que los profesionales de la formación nunca se van a quedar atrás.
