El mundo de la informática, e internet, ha irrumpido en nuestras vidas para instalarse y debemos aprender a usarlo. Debemos conocer que no se trata de usarlo sin control sino, más bien, todo lo contrario. En los centros educativos son los propios docentes los que establecen las reglas pero en los domicilios son los padres y madres los que deben reglar el uso de los mismos.
ESTABLECER LAS REGLAS
En las familias se deben establecer las reglas de uso de los equipos informáticos incluyendo también los smartphone y tablets. Estas reglas se deben cumplir pero guardando cierta flexibilidad en función de las necesidades de cada situación. Recomendamos que cuando las reglas se relajen sea por motivos que se puedan justificar.
Sabemos que en Internet podemos encontrar cualquier cosa que vayamos a necesitar, por eso es necesario establecer unos tiempos y reglas que, salvo excepciones, se deben mantener. También debemos considerar las páginas web por las que se puede "navegar" en función del perfil de los usuarios teniendo en cuenta la edad del usuario más joven.
Entre las tareas encomendadas debemos intentar generar en los pequeños un espíritu crítico. Por que una información aparezca en internet, o en un programa de televisión, no tiene porque ser cierta. También debemos evitar comportamientos obsesivos o repetitivos y se recomienda establecer sistemas de control parental.
Una de las mayores pegas cuando se habla de estos temas es que muchos padres, madres y tutores consideran que no tienen el nivel suficiente para gestionar estos asuntos delegando en los hijos mayores. No es necesario que se domine este campo para establecer las normas y hay que entender que forma parte de nuestra responsabilidad por lo que aplicando lo que sepamos, el sentido común y la ayuda del resto de las familias se podrá establecer la forma de reglar el empleo de los dispositivos informáticos.